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Las mujeres también escribimos la historia
Aunque a veces el hombre nos quiera opacar
Es así la sociedad soportamos las desigualdades
El derecho de la mujer se les olvido
con los buenos modales.
El vestido querida que llega al tobillo, y que el busto se esconda
detrás del corsé.
Y no vayas a opinar, tu trabajo no es dar opiniones pues no va
con la buena moral que una mujer
cuente sus emociones.
Ya verán que la historia sabrá responderles (responder)
y hasta el hombre más necio tendrá que aceptar
que podemos ocupar sin temores a nuestros sitiales
con trabajo y dignidad, las mujeres de los orientales
nos debemos a la libertad, y a la sensualidad