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Alguna mirada loca que despierte a mi alma.
Alguna meta que pueda hacerme zafar.
Soy como esos tontos que nada hoy perciben
Pero lo suficiente, es invencible.
Vos no fallaste como siempre viviste
la culpa plena será de esas penas
Esta mochila, mi amor, no te pertenece
no es y nunca va a ser tu elección
Entre el vacío está tu cara
discute, me empuja y fué
me siento tan perfecto...
Que me sorprenda la marea de arena y piedras
seguís siendo mi suspenso.
El milagro infalible que me hace volver a mirar
(y me dijiste que lo inexorable siempre pasa)
Negra, no fulmines tus pasos
Negra, no te olvides: lo impaciente, es tu cara
endulzada y rara, enmascarada.
Es tu maquillaje al que nunca veré mas que eso
entiendo tu sed de rasguño marcado en mi alma.
Fuiste ese trapo que nadie pintó, pero siempre cuelga.
Juro que voy a estar acá, para siempre.
No vistas de culpas, es extraño verte decrecer.
Por claros abismos, reacciona tu fragilidad.
Esta mochila, mi amor, no te pertenece.
No es y nunca va a ser, tu elección.
Entre el vacío está tu cara, discute, me empuja y fué
Me siento tan perfecto.
Que me sorprende la marea de arena y piedras
(seguis siendo mi suspenso)
El milagro infalible que me hace volver a mirar
y me dijiste que lo inexorable no siempre pasa.
Negra, no fulmines tus pasos.
Negra, no te olvides:
Lo impaciente en otra mitad de tu mente a tu cara
generosa y fragil
Aburrida y curiosa
Mentirosa y hábil
Desteñida.