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Los recuerdos perdieron su color en aquel lejano día,
Y al abrir lentamente el estuche de esa vieja pintura,
Vemos que nuestro amigo de la infancia siempre estuvo ahí,
Con su inmutable sonrisa,
Ambos pintamos nuestros sueños,
Y el lienzo de nuestros corazones conserva su brillo,
Así como la calidez de aquel día que nos tomamos las manos.
¿Por que siempre la gente mezcla el amor con el odio?
La alegría y el odio están destinados a entrelazarse en el lazo de nuestra juventud,
Como si fuera una cadena de flores.