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Donde las palabras se mueren,
y tus ojos no me besan,
y las canciones me duelen
mas de lo que te interesan.
Hay una cama encendida,
de exhibiciones obscenas.
Espero noches y días,
y todavía te espero,
y como loco te quiero.
La mañana en Mar del Plata,
la tarde solo en tu cama,
la madrugada en Madrid,
desenfundando las ganas
de deslizar por tu espalda,
mi dedo desafinado,
a la ciudad del pecado,
desalineado, te espero,
y como loco te quiero.
Ay, ay, ay, ay,
estoy como loco
y tampoco te puedo
dejar de amar.
Ay, ay, ay, ay,
las cosas que haría
por verte, tocarte,
ponerte sensual.
En mi diario viaje a tu falda,
me adjudiqué un enemigo,
desayuné de tu espalda,
con tu pelo de testigo.
Pedí prestados tus pechos,
soy un hombre hecho y derecho,
no voy a decepcionarte.
Para tocarte, te espero
y como loco te quiero.
Ay, ay, ay, ay,
estoy como loco
y tampoco te puedo
dejar de amar.
Ay, ay, ay, ay,
las cosas que haría
por verte, tocarte,
ponerte sensual.