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Levanto la mirada,
frunciendo el ceño
solo para ver el cielo caminar
y ese sol que va a brillar.
Desde el comienzo
dejo una imagen en los ojos,
no fue fácil apreciar,
fue difícil aprender que no hay tiempo por perder.
El latido está marcado
y no escapa la verdad,
queda todo en nuestro amor.
Corriendo va la luz
que ilumina la ciudad
despertando el día,
recorriendo este lugar.
Se deshoja un árbol
y sus hojas van cayendo en lentitud,
que nostalgia de pensar
que no hay tiempo por perder.
El latido está marcado
y no escapa la verdad,
vas a escuchar esta voz.
Que gritará, una vez más,
el mundo va a despertar.
Esta aguja gira y gira,
y no hay vuelta para atrás,
creo que vas a entender.
Que gritará, una vez más,
el mundo va a despertar.