Оригинален текст
Un terrorista, dos terroristas,
se balanceaban
sobre una torre derrumbada;
como veían que resistía,
fueron a llamar a un camarada.
Un terrorista, dos terroristas,
un guerrillero emerretista,
un traficante en el Huallaga,
se balanceaban,
sobre una torre derrumbada;
como veían que resistía,
fueron a llamar a Alan García.
Un terrorista, dos terroristas,
un guerrillero emerretista,
un traficante en el Huallaga,
el Búfalo Aprista, Agustín mantilla,
Alan García y su compañía,
Villanueva, se balanceaban,
sobre una torre derrumbada;
como veían que resistía,
fueron a llamar a Abimael.
Un terrorista, dos terroristas,
un guerrillero emerretista,
un traficante en el Huallaga,
el Búfalo Aprista, Agustín mantilla,
Alan García y su compañía,
Villanueva del campo, me da tanto asco,
como Chirino soto con su cara de poto,
como cinco policías en la esquina de Larco,
vendiéndole rifas a los más zampados,
y con tal corrupción hay en todos lados,
y por cinco lucas me compro un disputado;
un juez, un fiscal,
un par de abogados,
un arquitecto y un sub prefecto,
un novelista, un par de periodistas,
un arzobispo, un cardenal,
una virgen que llora y una virgen de verdad,
y quizá va Fujimori.
(Si no hay solución, la huelga continua) (3 veces)
Si no hay solución;
obre una torre derrumbada;
como veían que resistía,
nadie fue a llamar: a un electricista.