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El Pinta es un nene
que no sueña con juguetes,
prefiere el juego de los pasillos
corriendo riesgos reales,
jalando el gatillo.
Tiene tatuada una tumba
con el apodo de su único palme,
está sentado a la derecha
de los hombres más poderosos,
más intocables...
Cuando asoma la noche
el tour se torna de cacería,
acá a las armas no las carga el diablo
lo hace la miseria de vida.
Sueña con matar a hierro
a los jefes de otras clikas
y si puede a más de un chepa
para ser líder marero,
más intocable...
Es un nene y es el diablo
con sed de matar,
pobres sueños que salpican
alguna pared...
Algún día será un perro
como los hombres más poderosos,
más intocable...