Оригинален текст
Por los caminos que me llevan
derecho a la vida,
allá a lo lejos diviso un cruce que me desvía.
Ya no quiero seguir de largo,
por esta ruta que no tiene fin.
No sé qué hacer, no busco a nadie
si no es a ti.
Por los caminos que llevan
de nuevo a la vida,
voy buscando algún remedio
que sane mi herida,
y con el tiempo que ha pasado
de tu sonrisa, y esa vez,
en que tomé el sendero empedrado
y no quise volver.
Sé que alguien me estará esperando,
sentada al costado de las vías del tren.
Y si algún día me ves llegar,
extiende tus brazos hacia mí,
no me sueltes,
por favor, no me dejes ir.
Por los caminos sigo esperando
que llegue ese día,
anestesiado me ahogo en el llanto
que extiende mi herida.
Y en mis muñecas tallé tu rostro, hice el milagro de verte otra vez,
y nos fundimos en un beso
que a nadie le conté.