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Aja, yeah
Es el extraño retorno
yeah, yeah,
No se muy bien en que momento de mis largas noches me convertí en esto que ves y en realidad no es que me importe, soy un perro de bronce, mas viejo cada vez pero con el brillo en las fauces, tu me conoces, raperos desnutridos se alimentan de mis frases, mis versos les provocan hambre, sus rimas frágiles tropiezan con las hábiles, en mis renglones hay pirámides que levante con sus cadáveres, disfruto competir por que con esto crecí, resulto afín al fin de hacer lucir machín este jale del mc, por eso corre si me ves venir, tira la pluma, apaga el micro, largo de aquí, hay un gigante experto de los cortes, tiene su cabaña en una montaña de samples, mi cómplice de crimen siempre sabe lo que hace, camina con una pala en el hombro detrás de los remates, solido mi bólido corre por el cuaderno, pelirrojas en sabanas blancas mi mundo etéreo, soy un pirómano cautivo sin remedio, que vive apasionado por una mujer de fuego, cenizas y vapor, el roció de los pétalos refresca la flor, declina el animo suicida, cura el dolor, es medicina para enfermos de amor y la guarida preferida de este corazón, dame un papel yo te regreso un universo en el, un epitafio para el falso hecho con mi cincel, tu sabes bien quien es, el hombre aquel que cantándole al dolor les provoca placer, así que, solo disfruta mientras cavamos tumbas para raperos sarras que parecen una burla, para discos basura, de tantos alucines que antes de exigir respeto deben ofrecer disculpas, cuelga los guantes campeón, tira la toalla, no te subas al rin si ya no aguantas, para, ¿Qué te esperabas?, con esa cara, hay hielo en tu mirada camarada y en tus canciones casi nada, mis pájaros no beben de otras fuentes, viven volando en mis jardines, hay agua suficiente, al pie de una cascada donde brota la corriente, hay cosas que no existen pero nacen de repente, un cardo como heraldo rodeado por leones, para los días largos, llenos de nubarrones, enviamos ritmos gordos, cómodos en fardos, causa morbo hacer el calculo porque sube a millones, somos culpables de ser mejores, espero que les quede bien claro señores, no nos dejamos competir por nadie, en la pelea de los viernes, mi habilidad enorme contra tu estilo inerme, así que duerme tranquilamente que tengo un perro con insomnio en el patio de enfrente, no hay porque temer, ya les demostré ayer que por mi ruta no camina cualquier, deja que intenten, lengua romance y argot de calle, odio a la pose y amor al arte, somos un par de disparos al cobarde, llegaron tarde, hace rato que sus frases se revuelcan en un mar de sangre, ¿te sientes mal?, por el final, la consecuencia de la competencia siempre ha sido dura carnal, ¿de que te sirve ser tan real? Si la pereza es el pecado capital per cápita del rap, detrás de un micro me siento vivo y sé que estrilo con estilo cuando escribo porque es mi deber, tú debes aumentar el nivel, no digo que no hagas rap, digo que lo hagas bien.